La toxina botulínica puede estar indicada en diferentes momentos del tratamiento, según el sitio afectado. En la hiperhidrosis axilar, se utiliza este métoco cuando el resto de los tratamientos no ha dado resultados.
La toxina inhibe temporalmente la liberación de acetilcolina pero con más eficacia que los agentes tópicos. La evidencia básica para su uso es buena, y varios estudios recientes confirman una reducción del 75-100 % en el sudor después de su aplicación, con mejoría del estado emocional y físico.
Según un estudio los efectos fueron reportados al cabo de 6 a 9 meses, y aunque los niveles de satisfacción de los pacientes eran elevados, el tratamiento es potencialmente para toda la vida.
Los efectos secundarios son transitorios (hematomas, síntomas seudogripales, sequedad ocular, indigestión, y hemorragias localizadas en los menores de edad); varias revisiones sistemáticas han confirmado la seguridad a largo plazo de la toxina botulínica para el tratamiento de la hiperhidrosis axilar.
Se hicieron estudios con dos tratamientos, ambos fueron igualmente efectivos, con efectos colaterales menores buena tolerancia. En un ensayo aleatorizado, ciego, en 10 pacientes con hiperhidrosis axilar se comparó la eficacia de la BTX-A y la toxina botulínica B (BTX-B). Todos informaron una reducción de la producción de sudor, pero el resultado de la gravimetría fue mejor con la BTX-B.
La toxina botulínica se puede utilizar en las palmas y las plantas, pero en estas zonas el tratamiento es más doloroso que en las axilas. Se han hallado informes a pequeña escala de varios métodos que podrían mejorar la tolerancia a estos tratamientos. En su mayoría se trata de estudios no aleatorizados sin control ciego que compararon las técnicas.
Si deseas solucionar este problema que te incomoda y te aisla, pide tu cita con nuestro experto el dr. Fernández Blanco o entra en nuestro Facebook y realiza tu consulta https://www.facebook.com/drfernandezblanco/
Dr. Alfredo Fernández Blanco
El cirujano plástico Dr. Alfredo Fernández Blanco se destaca en su rama de la medicina, como el mejor cirujano de mamas, además es pionero en las llamadas cirugías secundarias o de las secuelas. Con más de 30 años de experiencia y miles de casos de éxito, sigue logrando los resultados más naturales que se pueden esperar en una operación de cirugía estética.