Aunque para gustos colores, y a pesar de que cada época tiene su ideal de belleza, hay algunos clásicos que permanecen. Por ejemplo: la elevación de pómulos para un rostro anguloso y armónico.
Elevación de pómulos con maquillaje
Desde luego, se puede engañar a los sentidos con el maquillaje, y en concreto con esa técnica ahora tan de moda llamada strobing.
No confundir con el contouring, que se fundamenta en marcar las zonas oscuras de la cara. El strobing consiste en dibujar una C luminosa entre el párpado y pómulo buscando, al decir de los expertos, crear dimensión y dar esplendor.
Elevación de pómulos con cirugía
En cualquier caso, el strobing no deja de ser un apaño cosmético y, por ello, inevitablemente efímero. Sin embargo, existe un procedimiento quirúrgico que ofrece una solución definitiva a aquellas personas que tienen un rostro redondeado y poco relieve, con pómulos escasamente resaltados. Nos referimos a la cirugía de prótesis de pómulos.
En esta intervención quirúrgica lo que hacemos es introducir una prótesis para aumentar el relieve del hueso cigomático o malar. La operación se puede realizar con anestesia local, aunque la experiencia nos dice que es más cómodo tanto para nosotros como sobre todo para el paciente recurrir a la sedación.
Si sopesas la posibilidad de someterte a una cirugía de aumento de pómulos, encontrarás en nuestra consulta información y consejo. Nos preocuparemos también de elegir, de conformidad contigo, la prótesis más adecuada: de silicona y en correlación con el resto de las facciones del rostro con el fin de lograr el objetivo deseado pero sin perder la naturalidad.
Por otro lado, es importante que tengas en cuenta que en los dos meses posteriores a la intervención, y para evitar que la zona se pigmente, deberás alejarte del sol o, por lo menos, evitar tomarlo en las mejillas.
Si deseas más información, contacta con nuestro equipo de Clínicas Fernández Blanco, llama al 915 54 09 24 (Madrid) o al 952 850 468 (Marbella, Málaga).
Dr. Alfredo Fernández Blanco
El cirujano plástico Dr. Alfredo Fernández Blanco se destaca en su rama de la medicina, como el mejor cirujano de mamas, además es pionero en las llamadas cirugías secundarias o de las secuelas. Con más de 30 años de experiencia y miles de casos de éxito, sigue logrando los resultados más naturales que se pueden esperar en una operación de cirugía estética.