La cirugía estética ha sido la responsable de que el mayor gánster de EE.UU esté entre rejas. Este hombre dirigió a la mafia irlandesa en Boston y ha sido condenado a dos cadenas perpetuas seguidas. La obsesión por las cirugías estéticas de su mujer ha llevado a la policía hasta él.
El estadounidense James “Whitey” Bulger, de 84 años, un gángster que dirigió la mafia irlandesa en Boston en los años 70 y 80, fue fugitivo de la Justicia estadounidense durante más de 16 años y figuraba junto al terrorista Osama bin Laden en la lista de los más buscados.
Durante los dos meses que duró el juicio, la acusación retrató a “Whitey” como un asesino despiadado, que mataba a cualquiera que viera como una amenaza, incluidos inocentes que habían sido testigos de alguna fechoría.
Bulger huyó en 1994 de Boston y permaneció durante 16 años escondido en un sencillo apartamento de Santa Mónica (California), una acomodada ciudad del condado de Los Ángeles a orillas del Pacífico, junto a su compañera sentimental, Catherine Greig. Ante las dificultades para localizarle, los agentes federales se centraron en el paradero de Greig, conocida por su obsesión por la cirugía estética, a quien finalmente descubrieron en 2011 acompañada por Bulger, que se había cambiado el nombre.
Su sanguinaria trayectoria fue inmortalizada por el actor Jack Nicholson en la película “The Departed”, de Martin Scorsese.
La obsesión por la cirugía plástica crea una historia diferente pero real.
Equipo de Comunicación
Dr. Alfredo Fernández Blanco
El cirujano plástico Dr. Alfredo Fernández Blanco se destaca en su rama de la medicina, como el mejor cirujano de mamas, además es pionero en las llamadas cirugías secundarias o de las secuelas. Con más de 30 años de experiencia y miles de casos de éxito, sigue logrando los resultados más naturales que se pueden esperar en una operación de cirugía estética.