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La blefaroplastia, comúnmente conocida como cirugía de párpados, es un procedimiento destinado a mejorar la apariencia de los párpados. Sin embargo, como con cualquier cirugía, existen riesgos y la posibilidad de que los resultados no sean los deseados. En este post, señalamos cinco señales clave que pueden indicar una blefaroplastia mal hecha.

Signos para reconocer una blefaroplastia mal hecha

1. Asimetría

La asimetría en los párpados después de la cirugía es una señal de alarma. Los párpados deben lucir uniformes y simétricos después de la recuperación. Si un párpado parece significativamente diferente al otro en términos de posición, forma o tamaño, esto podría ser un indicio de una técnica quirúrgica deficiente o de complicaciones posoperatorias.

2. Dificultad para cerrar los ojos por blefaroplastia mal hecha

Una de las complicaciones más serias de una blefaroplastia es la incapacidad de cerrar completamente los ojos. Este problema puede ocasionar sequedad ocular y otros problemas de la vista. Si experimentas esta dificultad después de la cirugía, debes buscar atención médica inmediata.

3. Cicatrices excesivamente visibles

Un buen cirujano minimizará el tamaño de la cicatriz de una intervención. Las cicatrices excesivamente visibles, irregulares o gruesas pueden ser un signo de mala práctica quirúrgica. Las incisiones deben realizarse de manera que las cicatrices sean mínimamente visibles y se mezclen con los pliegues naturales de los párpados.

4. Cambios en la vista por blefaroplastia mal hecha

Cualquier cambio en la vista después de una blefaroplastia, como visión borrosa o doble, es motivo de preocupación. Estos síntomas pueden ser temporales, pero también pueden significar que se ha dañado alguna de las estructuras oculares.

5. Inflamación o hematomas persistentes

Es normal experimentar algo de hinchazón y que aparezcan moretones después de la cirugía, pero si estos síntomas persisten por un período prolongado o parecen empeorar, podría ser una señal de infección o de otras complicaciones.

Cómo prevenir una blefaroplastia mal hecha


Para prevenir una blefaroplastia mal hecha, es importante elegir un cirujano plástico cualificado y experimentado. El médico debe tener una formación adecuada y haber practicado un número significativo de blefaroplastias. Además, debes asegurarte de que el doctor te explique los riesgos y complicaciones de la cirugía.

A continuación, algunos consejos para elegir un buen cirujano plástico:

  • Pide recomendaciones a amigos, familiares o conocidos.
  • Investiga al cirujano y a la clínica en la que trabaja. Busca reseñas.
  • Solicita una consulta personal para conocer al médico y que te oriente.
  • Pide ver fotos de casos anteriores.

¿Estás pensando en someterte a una cirugía de ojos? ¿Tienes signos de una blefaroplastia mal hecha? Contacta con nuestro equipo médico de nuestras clínicas en Madrid y Marbella.

Dr. Pablo Arias Abad

Nacido en Medellín, Colombia, realizó su formación médica en la Universidad CES 2001-2006 y completó el Servicio Social Obligatorio en el Hospital Antonio Roldán Betancur de Apartadó en 2007. En 2008 viaja a España obteniendo su plaza MIR en el Hospital Virgen del Rocío de Sevilla, dónde realizó sus estudios de cirugía plástica, reparadora y estética desde 2009-2014. En 2015 trabajó como asistente-fellow de la Dra Françoise Firmin en París, referente mundial en reconstrucción auricular, y cirugía facial y mamaria. Desde 2016 instalado en Madrid dónde día a día persigue el estado del arte de la cirugía estética.

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